La
inseminación artificial en bovinos ocupa un papel muy importante en la
ganadería y en el mercado, por lo tanto la mayoría de ganaderos han escogido a
utilizar este método para la mejora y producción rápida de sus fincas. Por lo
tanto la producción de bovinos mediante la inseminación artificial es una de
las innovaciones técnicas más útiles para el mejoramiento de la eficiencia productiva
de los rebaños bovinos esta técnica es utilizada mayormente en los países
desarrollados para la producción de carne. La ganadería bovina ofrece ventajas
sanitarias, genéticas y economía, en la
parte genética se pueden presentar ventajas muy importantes que evita la trasmisión de enfermedades del tracto reproductivo que en la cual es muy
importante para que el consumidor no obtenga enfermedades tales como la
brucelosis que se transmite de un bovino a humano también es muy importante o
ventajear en mejorar la calidad genética
del rebaño al usar semen de toro está
comprobada su prioridad genética, en la parte reproductora y consumista los bajos márgenes de hectárea y baja
rentabilidad de las explotaciones de cría más producción y menos gastos
económicos que perjudiquen al productor por otro lado, hace que su aplicación sea más
limitado en los sistemas de producción de carne y leche (doble propósito).
La inseminación artificial se inició
en la práctica de animales domésticos, que fue practicada en perros y por
primera vez, en 1780 por el científico ruso Ivanov. Después de practicar con
caninos se dedicó a la mejora de las granjas agrícolas por lo tanto se logró
iniciar la inseminación artificial en yeguas vacas y ovejas, tan exitosamente
que se estableció un laboratorio dedicado a tal fin y se prepararon cientos de
inseminadores. Pare el año de 1938, inmediatamente después de la primera Guerra
Mundial, se habían inseminado en Rusia 1.200.000 vacas, 15 millones de ovejas y
120.000 (yeguas). Mientras tanto, en Dinamarca se organizaba la primera
cooperativa de inseminación artificial, con tanto acierto que para 1958 casi la
totalidad de las vacas (100%) se reproducían artificialmente. En los Estados
Unidos, la inseminación artificial en el ganado bovino se inició en 1938,
desarrollándose rápidamente para cubrir cerca de 10 millones de vacas lecheras
hoy en día y ser el mayor exportador de semen congelado a todo el mundo.
En Venezuela la promoción de la inseminación
artificial estuvo a cargo dela Dirección de Ganadería del Ministerio de
Agricultura y Cría, conociéndose que la primera cría producto de la técnica
(utilizando semen fresco), se obtuvo en 1942, en la actualidad sólo un 15% de
los rebaños lecheros del país, utilizan la técnica, esperándose la
incorporación de más rebaños en la medida que se capacite debidamente un mayor
número de inseminadores. En mayoría de países la población ganadera utiliza
monta natural ya que en algunos casos desconfían de del producto o no saben
cómo se practica la inseminación y siguen con su método natural pero de lo que
no saben es de que por medio de esta técnica se puede producir una finca en
menor tiempo posible y una organización más preventiva a cualquier situación
que se presente en el rebaño. La inseminación artificial es más económica que
el cuidado, mantenimiento y utilización de toros en las fincas en la cual lo
sugiere el médico veterinario pedro piñeda en (1942).
Según lázaro
spallanzani, el científico ruso Ivanov (1907) la inseminación artificial es la técnica a
través la cual se recolecta semen de un macho y se coloca en el tracto reproductor de la
hembra, mediante el uso de instrumentos diseñados para tal fin, En plan de inseminación artificial para ser
ejecutado como éxito se requiere una buena elección de los reproductores para
extraerles el semen y una eficaz y detección de celos en el establecimiento para
inseminar a las vacas en el momento adecuado, mediante la inseminación no
desperdiciar dosis de semen con vacas que aún no están en celos. La
inseminación permite la prueba en toros más segura, durante
este tiempo de espera los toros o toretes se mantienen bajo estricto
aislamiento, reservándose a fin solo aquellas cuyas prueba resulte
satisfactoria; es decir, cuya cría nacida en la misma época y criada bajo
condiciones a las de otros toros demuestren que son superiores en producción de
doble propósito.
Las ventas de
la inseminación influyen en el éxito de un programa de inseminación artificial,
radica en saber valorar los pequeños detalles que la constituyen y en la
realización de supervisión y evaluaciones continuas. Entre las condiciones
mínimas que se necesitan en una finca, para la instrumentación de un programa
de inseminación artificial destacan las siguientes:
- El ganado debe estar totalmente identificado para
disponer de buenos registros de producción y reproducción.
- La finca debe disponer de instalaciones
funcionales, corrales y bretes, para facilitar el manejo de los animales
sometidos al programa.
- División apropiada de potreros que permita tener
una adecuada subdivisión del rebaño en: vacas preñadas, vacas lactantes,
vacas no lactantes, vacías y novillas de reemplazo.
- Los animales en pastoreo deben tener disponibilidad
y calidad de forraje que satisfaga sus requerimientos nutricionales y en
aquellas zonas donde existen períodos de sequía, es necesario la
suplementación alimenticia.
- Suministro apropiado de sal y minerales para
garantizar un buen porcentaje de preñez.
- Personal capacitado para todas las labores que el
programa requiere, tales como: prácticos inseminadores, obreros
adiestrados en la observación y detección del celo. Este
personal debe ser supervisado por el Médico Veterinario, quien
planifica y coordina el programa de inseminación artificial.
Esta ventaja
considera no sólo la economía en cuido y mantenimiento de toros, sino también
el progreso gen ético del rebaño como producto del uso de inseminación artificial
con semen de toros probados, con semen de toros probados de razas lecheras,
representa para el ganadero una inversión, no un gasto. Mejores crías
significarán mayor producción, mejor tipo y la mejor valoración de su rebaño.
La inseminación artificial permite al ganadero utilizar toros probados, cuyo
valor sobrepasa su posibilidad de adquirirlos para su uso particular en su rebaño.
Elimina los peligros que ofrece el toro semental. Los toros de razas lecheras
son agresivos por naturaleza, siendo causa de accidentes a veces mortales, la
inseminación artificial estimula al ganadero a mejorar la alimentación del rebaño,
su manejo y supervisión, para mejor producción y reproducción, las vacas
lecheras requieren de buena alimentación, salud y manejo. Al utilizar
inseminación artificial, la supervisión diaria del rebaño aumenta. El
inseminador chequea el rebaño dos o más veces por día, el médico veterinario
supervisa el programa reproductivo, se sabe cuándo ocurrirán los partos, se
observan y cuidan más las crías y el es el que va a estar encargado de que se
realice la inseminación por lo tanto la vaca y el toro va a estar en el mejor
cuidado posible. Los rebaños mediante el proceso de inseminación tiene que
tener un cuidado muy excesivo ya que el productor o ganadero van a estar
financiando el proceso y se requiere de que lo hagan con la mejor manera. El
trabajo extra de atender mejor el ganado, se paga con la valorización del
rebaño al incorporarse al mismo, las crías que son producto de la inseminación
artificial con semen de toros probados.
CONCLUSIONES
Se
conoce como inseminación artificial que es todo aquel método de reproducción de
embriones de buena calidad o de mejor carga genética por lo tanto la
inseminación es favorable para muchos ganaderos ya que ofrece mayor producción
de rebaño genéticamente se clasifican para obtener el mejor embrión, que no traiga problemas en su crecimiento y sea más fácil adaptarlo a las condiciones
que se necesiten para obtener mayor producción, también ofrece medidas
sanitarias , la inseminación artificial con semen congelado procesado y
manejado adecuadamente, previene la diseminación de enfermedades venéreas,
comúnmente transmitidas por la monta natural. La inseminación artificial trae
cantidad de beneficios al productor es
más económica que el cuidado, mantenimiento y utilización de toros en las
fincas, la utilización de semen de toros de mejor calidad que trae ganancias al
productor por lo tanto no existen
desventajas en este tipo de reproducción.
Presenta para el ganadero una
inversión no un gasto, mejor tipo y mejor valoración del rebaño, se elimina la
monta natural de un toro semental por lo cual los toros de producción de leche
son muy agresivos, esto es muy común para que el ganadero cambie de opinión y prefiera la inseminación artificial
para disminuir las lesiones que se obtengan mientras la preñes.